Alergia en la piel de los gatos ¡Causas y tratamiento!

lunes 15 julio, 2024
La alergia en la piel de los gatos es un problema común que preocupa a muchos dueños de mascotas. Si has notado que tu gato se rasca excesivamente, tiene áreas enrojecidas o heridas en la piel, es posible que esté sufriendo una alergia cutánea.
Estos padecimientos pueden causar mucho malestar y, si no se tratan adecuadamente, suelen llevar a infecciones secundarias y a empeorar la salud general de tu mascota. Pero no te preocupes, porque en este artículo exploraremos las causas más frecuentes de las alergias en gatos y los tratamientos efectivos para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de tu felino.
¿En qué consiste un cuadro de alergia en la piel de los gatos?
En palabras simples, la alergia en la piel de los gatos es una reacción exagerada del sistema inmunológico a ciertos agentes alérgenos. Estos pueden ser ambientales, alimentarios o estar relacionados con parásitos como las pulgas o las garrapatas.
Cuando un gato con una predisposición genética se expone a dichos alérgenos, su sistema inmunológico responde de manera anormal, causando inflamación de la piel y purito. Los gatos afectados, además de los síntomas mencionados, pueden presentar:
- Enrojecimiento.
- Costras.
- Pérdida de pelo.
- Heridas por el rascado constante.
En la mayoría de los casos, la alergia cutánea en los gatos no es solo una molestia estética, ya que puede afectar gravemente su bienestar, causando estrés y dolor. Por ello, es esencial identificar y tratar adecuadamente la causa subyacente para proporcionar alivio y prevenir complicaciones específicas.
Causas de la alergia en la piel de los gatos
La alergia en gatos puede ser desencadenada por diversas causas, cada una afectando de manera distinta al bienestar del felino. A continuación, te contamos cuáles son las más frecuentes:
Picadura de pulga
La saliva de la pulga puede causar una reacción alérgica en algunos gatos, resultando en dermatitis alérgica por pulgas. Esto provoca un intenso picor, enrojecimiento y lesiones por el rascado excesivo. Incluso una sola picadura puede desencadenar una respuesta severa en gatos demasiado sensibles.
Alergia alimentaria
Estas alergias se desarrollan cuando el sistema inmunológico del gato reacciona negativamente a ciertos ingredientes presentes en su dieta, como proteínas específicas de carne, pescado o productos lácteos.
Los síntomas de la alergia incluyen picor, inflamación y problemas digestivos como vómitos o diarrea. Para identificar si es causada por un alimento específico, se suele recurrir a dietas de eliminación, donde se suprimen posibles alérgenos de la dieta del gato y se observa si hay una mejoría en los síntomas.
Alérgenos presentes en el entorno
Los gatos también pueden desarrollar estos padecimientos a diversos alérgenos presentes en el ambiente que frecuenta. Estos pueden incluir polen, moho, ácaros del polvo y sustancias químicas presentes en productos de limpieza o perfumes.
La exposición a estas sustancias puede causar dermatitis atópica que se manifiesta con picor, enrojecimiento y lesiones en la piel. Para identificarlos es necesario realizar pruebas específicas y un proceso de eliminación que determine la fuente exacta del problema.
Como ves, identificar la causa específica de la alergia en la piel de los gatos es crucial para aplicar el tratamiento más adecuado y mejorar su calidad de vida. De esta manera, evitas que los síntomas empeoren y te aseguras que estos motivos no desencadenen en un nuevo episodio de alergia en el futuro.
Signos de alergias en los gatos
Las señales de alergias en los gatos pueden variar, pero algunos síntomas comunes son bastante fáciles de reconocer.
- Prurito intenso: tu gato se rasca constantemente, y aparecen áreas enrojecidas e inflamadas en la piel.
- Pérdida de pelo, especialmente en zonas donde se rasca o lame frecuentemente.
- Presencia de pequeñas costras o pápulas, conocidas como dermatitis miliar.
- Heridas abiertas debido al rascado excesivo, en casos más graves.
- Síntomas respiratorios como estornudos y tos.
- Problemas gastrointestinales como vómitos y diarrea.
Esto son los síntomas más frecuentes, pero a veces no suelen ser muy evidentes. Por ello, es importante estar atento a cualquier cambio en el comportamiento de tu gato, como un aumento en el acicalamiento o el rascado, ya que estos pueden ser indicadores de una alergia subyacente.
Reconocer estos signos temprano puede ayudar a proporcionar un tratamiento adecuado y mejorar la calidad de vida de tu mascota.
Tratamiento para la alergia en la piel de mi gato
Tratar la alergia en la piel de los gatos requiere un enfoque integral y específico según la causa subyacente. No obstante, independientemente de la causa, el tratamiento en la mayoría de los casos sigue un proceso similar al que te detallamos a continuación:
Diagnóstico
El veterinario realizará un examen exhaustivo, incluyendo la historia clínica, y posiblemente ordenará pruebas como raspados de piel, análisis de sangre y dietas de eliminación. En este primer paso, es fundamental descartar otras posibles causas como infecciones o parásitos antes de llegar a un diagnóstico definitivo.
Tratamiento según la causa
El tratamiento dependerá de la causa específica:
- Picadura de pulga: se prescribirán antiparasitarios adecuados para eliminar estos parásitos y prevenir futuras infestaciones.
- Alergias alimentarias: se recomendará una dieta con proteína hidrolizada o una dieta de eliminación para identificar y evitar el alérgeno específico.
- Alergenos ambientales, como polen o polvo: puede ser necesario reducir la exposición del gato a estos alérgenos, usar filtros de aire y limpiar regularmente su entorno. En algunos casos, se pueden utilizar tratamientos como antihistamínicos o inmunoterapia.
Tratamiento de la irritación dermatológica como principal signo
El manejo de la irritación y las lesiones cutáneas es esencial para mejorar la calidad de vida de tu mascota, durante y después del tratamiento. En este sentido, los cuidados más recomendados son:
- Glucocorticoides: se usan para reducir la inflamación de la piel y el prurito.
- Ciclosporina: un inmunosupresor que ayuda a controlar los síntomas alérgicos.
- Antibióticos y antifúngicos: si hay infecciones secundarias, estos medicamentos serán necesarios para tratar las infecciones bacterianas o fúngicas.
- Cuidados tópicos: champús medicados y lociones pueden ayudar a aliviar la irritación y acelerar la cicatrización de las heridas. Mantener las áreas afectadas limpias y evitar que el gato se rasque o lama excesivamente es crucial para una recuperación rápida.
Recuerda que trabajar junto a tu veterinario para diagnosticar y manejar estas alergias puede mejorar significativamente la calidad de vida de tu gato. Además, te recomendamos mantener una observación constante y estar atento a los signos para asegurar su bienestar y salud óptima.
Fuentes
- Schissler, J. R. DESMITIFICANDO LA DERMATITIS ATÓPICA FELINA. Royal Canin.
- Alergias comunes de los gatos. (s. f.). Royal Canin CO.
Revisado por:

Luis Alberto Enciso López
Médico Veterinario Zootecnista
Matrícula Pofesional No. 12415