Alimentación de un ternero ¡Pautas y recomendaciones!

La nutrición adecuada en los primeros días de vida de los terneros es fundamental para asegurar su crecimiento saludable y prevenir problemas digestivos costosos. Los productores ganaderos enfrentan desafíos significativos cuando los terneros no reciben el cuidado nutricional apropiado, incluyendo episodios de diarrea neonatal, acidosis ruminal y deshidratación.

Estos problemas no solo afectan la salud de los animales, sino que también pueden resultar en pérdidas económicas considerables. Por ello, en este artículo, te contamos las mejores prácticas para la alimentación de un ternero, cómo prevenir complicaciones comunes y asegurar una crianza exitosa que maximice la productividad y minimice los costos asociados a la nutrición deficiente.

Alimento para terneros recién nacidos: ¡Importancia del calostro!

El calostro, la primera leche materna, es esencial para el bienestar del ternero, ya que le proporciona una serie de beneficios que son vitales en sus primeras horas y días de vida. ¿Por qué? Pues esta sustancia es una fuente rica de inmunoglobulinas, que son anticuerpos cruciales para la inmunidad pasiva del ternero.

Al nacer, los terneros no tienen defensas naturales contra los microorganismos del entorno, y las inmunoglobulinas del calostro se convierten en su primera línea de defensa. Además, esta sustancia es rica en nutrientes esenciales como proteínas, energía, vitaminas y minerales que contribuyen al desarrollo adecuado y la salud general del recién nacido.

También desempeña un papel protector al ayudar a mantener la integridad de la pared intestinal y facilita la eliminación del meconio, el primer contenido del intestino del ternero.

Para maximizar los beneficios del calostro, es importante administrarlo correctamente y en el momento adecuado. Se recomienda ofrecerlo del primer día y de vacas adultas sanas, ya que contiene la mayor concentración de inmunoglobulinas.

En caso de que la madre del ternero tenga problemas con la producción de calostro o el calostro sea de baja calidad por mastitis u otros problemas, el calostro excedente puede ser conservado mediante congelación en bolsas de polietileno bien selladas para su uso futuro.

Formas de alimentación de los terneros

La alimentación de un ternero recién nacido es la base principal para asegurar un crecimiento saludable y un desarrollo óptimo. A continuación, te contamos los principales métodos de alimentación y gestión que se utilizan para lograr estos objetivos.

Sistemas de amamantamiento

• Sistema natural: En este enfoque, el ternero permanece continuamente con la vaca, que solo se ordeña una vez al día para extraer el excedente. En este caso se prioriza el crecimiento y desarrollo del ternero sobre la producción de leche. Permite que el ternero se beneficie de una alimentación constante y natural, favoreciendo su desarrollo óptimo.
• Ternero al pie de la vaca: Este método implica separar al ternero de la vaca para realizar el ordeño manual o mecánico, dejando un cuarto de la vaca sin ordeñar para que el ternero consuma su ración láctea. El ternero pasa el resto del tiempo en la pradera o en estabulación con acceso a otros alimentos. Se trata de una opción que puede ser eficiente con una o dos ordeñas al día, y ayuda a equilibrar la producción de leche y la nutrición del ternero.
• Crianza con vacas nodrizas: El ternero se separa de su madre a los 2-5 días y se le «pega» a una vaca nodriza que ya tiene su propio ternero. Las vacas nodrizas son seleccionadas por su capacidad limitada para ser ordeñadas, y pueden amamantar entre 2 a 4 terneros. Aunque este sistema puede reducir la necesidad de mano de obra, el costo de mantener una vaca nodriza es elevado, y puede afectar el ciclo reproductivo de la vaca.

Sistemas de crianza artificial

En este caso, el ternero se separa de la vaca y se le proporciona una dieta completa mediante un sistema artificial con el uso de lactoreemplazadores. El manejo puede ser individual o en grupos, e igualmente es necesario que el ternero haya recibido calostro en sus primeras horas de vida.

La crianza artificial permite una gestión más controlada de la salud y la alimentación, aunque requiere un espacio adecuado para evitar problemas respiratorios y de salud.

Destete de terneros

El destete de los terneros es un proceso crítico que debe realizarse cuando el animal está listo para cambiar a una dieta sólida. Se recomienda realizarlo cuando el ternero consume entre 0,8 y 1 kg de concentrado de iniciación por 2 a 3 días seguidos.

Este proceso puede comenzar alrededor de los 60 días de edad, cuando el ternero ha alcanzado un peso adecuado de 70-80 kg y muestra un buen consumo de concentrado.

Para evitar afectar el ritmo de ganancia de peso, es aconsejable continuar con el concentrado de iniciación hasta los 3 meses de edad, ofreciéndolo a voluntad pero no superando los 2 a 2,5 kg por día. Un destete más tardío puede ser beneficioso al principio, asegurando que los terneros estén bien criados y minimizando la mortalidad.

Suministro de concentrados para terneros y forrajes

Una opción que puede sustituir la crianza natural en casos excepcionales son los concentrados, pero ¿cuáles son sus características y beneficios?

Concentrados

Los concentrados de iniciación deben ofrecerse desde el segundo o tercer día de vida. Este alimento debe contener un 18-20% de proteína cruda en la materia seca y debe ser ofrecido en pequeñas porciones al principio, aumentando gradualmente. Es muy importante eliminar los sobrantes para evitar fermentaciones y contaminaciones que puedan causar diarrea.

Pastos y forrajes

Los pastos y forrajes pueden ser excelentes recursos alimentarios, pero su consumo debe ser manejado con cuidado. Por ejemplo, el heno no debe suministrarse en las primeras 4 a 5 semanas para no interferir con el consumo de concentrado, mientras que los pastos pueden ser una buena fuente de alimentación en épocas favorables, pero durante el verano seco, su calidad puede ser deficiente para los terneros jóvenes.

Suplementación con minerales y vitaminas para el crecimiento de terneros

La suplementación con minerales y vitaminas es fundamental para el crecimiento y desarrollo saludable de los terneros. Estos nutrientes juegan un papel crucial en la salud general, el desarrollo óseo, la función inmunitaria y el rendimiento reproductivo.

En este sentido, los minerales como el calcio, fósforo, magnesio y sodio son esenciales para el desarrollo óseo y la función metabólica. Las deficiencias de estas sustancias en el organismo de los terneros pueden llevar a problemas como raquitismo o dificultades en el crecimiento.

Además, los minerales como el zinc y el manganeso son vitales para el desarrollo del sistema inmunitario y la prevención de enfermedades.

Por otra parte, las vitaminas, especialmente las vitaminas A, D y E, también son muy necesarias.

• La vitamina A es importante para la salud ocular y la función inmunitaria.
• La vitamina D favorece la absorción de calcio y fósforo.
• La vitamina E actúa como antioxidante, protegiendo las células del daño.

Una deficiencia en cualquiera de estas vitaminas puede resultar en problemas de salud y en un crecimiento deficiente.

Para asegurarte de que están recibiendo la nutrición adecuada, es preciso monitorear regularmente la salud y el crecimiento de los terneros. Esto lo puedes garantizar a través de los análisis de sangre y el seguimiento del crecimiento, con el fin de identificar deficiencias y ajustar las dosis de suplementos para mantener un equilibrio nutricional adecuado.

Como ves, una alimentación adecuada y la suplementación estratégica son esenciales para el desarrollo óptimo de los terneros. Implementar prácticas nutricionales efectivas te ayudará a prevenir problemas de salud costosos y promover un desarrollo óptimo, sentando las bases para una crianza exitosa y rentable.