¿Cómo identificar un aborto espontáneo en gatas?

Que nuestra gata está esperando mininos es un acontecimiento bastante encantador, no obstante, puede suceder que sencillamente por un mal desarrollo del embrión, falta de nutrientes o por la simple selección natural, se pierdan esas vidas en formación que esperábamos con tantas ansias en nuestra familia. Estas pérdidas tienden a afectar emocionalmente a las gatas, y bajo ciertas condiciones, pueden representar una amenaza a su salud.

En   este   post   te   explicaremos   en   qué   consiste   el   aborto   en   gatas, así   como cuándo saber si una gata ha sufrido algún aborto espontáneo. Estudiaremos las posibles causas de este suceso y qué debemos hacer para poder recuperar el ánimo y salud de la gata, y volver a la vida normal junto con nuestra familia.

Continúa leyendo este artículo y aprende cómo identificar un aborto espontáneo en gatas.

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Aborto espontáneo en gatas ¿En qué consiste?

Un aborto espontáneo en gatas consiste en la muerte del feto durante el embarazo. Este evento puede ocurrir en cualquier momento de la gestación, y en las gatas, así como en otros mamíferos, las maneras en cómo se manifiesta este aborto espontáneo varían de acuerdo con la etapa en que ocurre. 

El aborto en gatos es algo que puede suceder más frecuentemente de lo que crees, y es importante que sepas identificar las señales cuando tu gata no está teniendo un embarazo del todo bueno. 

En el caso de que el embarazo de tu gatita no esté dando buenas señales, existe la probabilidad de que ella no llegue a dar a luz. Esta puede perder los fetos mucho antes de que cumplan la gestación o que, en caso contrario, nazcan sin vida al momento del proceso de parto.

¿Cómo saber si mi gata abortó? Signos comunes

Determinar cuándo una gata ha sufrido un aborto espontáneo, es difícil en la mayoría de los casos. Sobre todo durante las primeras cuatro semanas de embarazo, ya que ellas tienden a comerse la placenta, los fetos muertos y en general a hacer su propia limpieza. 

Los síntomas de un aborto espontáneo en una gata pueden variar de acuerdo con la etapa de gestación en que ocurra y son muy diferentes entre sí. A continuación, se nombrarán las etapas y los síntomas de un aborto durante cada una de ellas:

• Fase temprana: el aborto en esta etapa es el menos problemático de todos y de hecho la mayoría de ellos ocurren durante este período (en los primeros 45 días). El embrión a menudo es reabsorbido por el cuerpo de la madre y el aborto pasa completamente desapercibido. Como resultado, habrá secuelas hormonales en la gata, como cambios de conducta y la vuelta del celo. No obstante, la monta deberá evitarse. Ella podrá quedar embarazada, pero hasta varios meses después. 
• Fase intermedia: esta etapa abarca desde la quinta hasta la sexta semana de gestación, y durante ella, la gata suele tener pérdidas de sangre y tejidos. Estos abortos también son difíciles de percibir ya que la gata suele comerse los tejidos y limpiarse bien. Un aborto en esta etapa produce mucho dolor, por lo que su abdomen estará muy sensible y manifestará molestias si llegas a tocarlo. Pasadas algunas semanas del aborto, las mamas de la gata regresarán a su tamaño normal. En cuanto a una nueva monta, se recomienda que no se de en un tiempo menor a 8 meses. 
• Fase avanzada: está fase abarca desde la séptima hasta la novena semana de embarazo. Los abortos en este período se caracterizan porque los gatitos son expulsados muertos, antes o en su fecha de nacimiento. Y puede ocurrir que el feto fallecido se momifique dentro del útero. La momificación ocurre cuando el cuerpo del feto es cubierto por una membrana protectora y éste queda encerrado y protegido dentro del útero. En muchos casos, la momificación no representa ninguna amenaza para la gata; pero existen casos en que este suceso sea el origen de una infección.

Llevar a tu gata al veterinario será fundamental cuando ocurre un aborto en fase avanzada y el feto se momifica impidiendo su salida. En este caso será necesario practicarle una cesárea de emergencia. Lo anterior, para asegurarse que no quede ningún feto dentro del vientre y que sea eliminada la membrana que lo protege.  

Otros signos de un aborto

Otros síntomas generales de alerta que indican que nuestra gata ha sufrido un aborto en cualquiera de las etapas arriba mencionadas son las siguientes:

• Apatía o desinterés generalizado.
• Debilidad.
• Aislamiento.
• Falta de interés por el nido.
• Hemorragias.
• Fiebre.
• Diarrea y/o constipación.
• Secreciones vaginales (pueden venir con sangre, moco o pus)
• Vómitos.

Como puedes ver, todos estos síntomas son claves para saber cuándo una gata ha sufrido una pérdida, y si tu mascota presenta alguno de ellos es recomendable que contactes a un veterinario lo más pronto posible para evaluar su estado de salud. 

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Causas de un aborto en gatas

Las causas de un aborto en gatas se pueden clasificar en causas infecciosas y causas no infecciosas. A continuación, entraremos en detalle acerca de estas dos causas y nombraremos por separado los agentes que las causan:

• Origen o causa infecciosa: en esta categoría entran las enfermedades infecciosas propias de los gatos. Estas enfermedades pueden ser de origen viral, bacteriana o parasitaria. La mayoría de los abortos espontáneos son causados por agentes virales tales como el virus de inmunodeficiencia felina, que es como el VIH de los humanos; el herpes felino que ocasiona problemas en la reproducción; y la panleucopenia. Entre las causas bacterianas podemos encontrar la presencia de la brucella, una bacteria que es contagiosa entre los gatos y que se puede transmitir a los humanos. Y finalmente las causas parasitarias pueden ser la Toxoplasmosis, un parásito que retrasa el crecimiento de los mininos dentro del útero y produce malformaciones, daños oculares y la muerte del feto.
• Origen o causa no infecciosa: en esta categoría podemos encontrar la leucemia felina, que es un cáncer del que pueden padecer los gatos. La segunda causa pueden ser los defectos genéticos de los gatos cruzados; ya que cuando se aparean gatos de una misma raza, ocurre que su patrimonio genético es muy limitado y además, por condiciones hereditarias, los padres le pueden pasar enfermedades a sus hijos gatunos durante la gestación. La tercera causa no infecciosa puede deberse a que la gata embarazada sufra algún golpe en el abdomen por una pelea con otro animal o ya sea que el mismo estrés producido por la pelea la haga abortar. 

Las causas hormonales son otro factor, como por ejemplo los bajos índices de progesterona en la gata, la cual es la hormona responsable de mantener el embarazo.

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¿Qué debo hacer si mi gata tuvo un aborto? 

Si tu gata ha sufrido un aborto es importante que no entres en pánico, pero si que acudas con un veterinario de forma inmediata. No obstante, puedes implementar ciertas acciones mientras cuentas con la atención de un especialista.

• Provee una fuente abundante de agua: la deshidratación después de un aborto es una de las principales causas de muerte en las gatas, por ende, debe evitarse a toda costa. 
• Agenda una cita con el veterinario: el veterinario le hará una ecografía para asegurar que no tenga algún feto dentro del vientre, así como un examen de serología, y cualquier otro estudio necesario para cuidar la salud de tu mascota.
• Ofrécele una manta caliente: puedes calentar la manta utilizando agua caliente. Envasa el agua caliente en una botella y envuelvela con una sábana. Coloca las sábanas calientes en una caja de cartón junto con una almohada. Esto ayudará a mantener la temperatura corporal de la gata y evitará algún desbalance. 
• Recoge los desechos biológicos con guantes: el uso de guantes es de suma importancia, ya que existen muchas enfermedades que pueden ser transmitidas por la descomposición de los fetos. 
• Deja que la gata vea y reconozca lo que ha salido de su cuerpo: de esta manera, la gata reconocerá que no será madre.
• Procura buscar un tratamiento para la mastitis: después del aborto, las mamas de las gatas terminan llenas de leche que si no es utilizada pueden formar cálculos dentro de ellas provocando deformaciones y en el peor de los casos, puede desencadenar un cáncer. Esta acumulación de cálculos se conoce como mastitis.

Las gatas son animales muy sensibles que necesitan de nuestro apoyo al pasar por momentos difíciles como un aborto. Por eso, nuestro deber ofrecerles todo el cariño y cuidados que necesitan para recuperar su salud física, mental y emocional. 

Esperamos que este post haya sido de gran ayuda para ti, con el fin de que puedas identificar cuándo tu gata pueda estar pasando por un proceso de aborto y cuáles son las medidas que debes tomar en estos casos.