La Risa como Terapia: El Impacto de la Doctora Clown en Hospitales

“Tomarse la risa en serio”, ese ha sido el propósito de Luz Adriana Neira, más conocida como la Doctora Clown, que desde hace más de 26 años se ha encargado de brindarle risas y alegrías a las poblaciones vulnerables y en especial a los niños que enfrentan difíciles situaciones de salud en nuestro país. En entrevista, la CEO y fundadora de esta fundación nos contó sobre los desafíos y satisfacciones de sacar adelante una organización con un propósito tan valioso como este.

Sigue leyendo y descubre más sobre la iniciativa de la Dra. Clown que ha brindado de ilusión y alegrías en los hospitales de Colombia.

¿Quién es la Doctora Clown?

En la entrada de un hospital lleno de niños y adultos enfrentando diversas enfermedades, la risa resuena como un eco de esperanza. La portadora de todo esto es la Dra. Clown, una soñadora mujer que ha dedicado su vida a ayudar a otros a través del arte del Clown. Nos contó cómo surgió este personaje y su dualidad frente a su historia de vida personal.

«La Doctora Clown es un hada que viene a jugar con todos los niños de Colombia. «Está atenta a potenciar la salud física y emocional a través de la risa», explica Luz Adriana.

Este personaje no solamente busca provocar carcajadas; también es un reflejo de su propia infancia, marcada por algunas carencias.

«Luz Adriana nunca tuvo juguetes, pero la Doctora Clown sí quiere compartirlos con todo el mundo. «Siento que este personaje viene a rescatar a la niña que fui»

La creación de este personaje le permitió transformar sus vivencias personales en una herramienta de esperanza y alegría para los demás.

El Inicio de una Misión Transformadora

El nacimiento de esta iniciativa se remonta al 13 de febrero de 1998. Desde entonces, la fundación Doctora Clown ha enfrentado numerosos retos, comenzando con la percepción inicial de los payasos en contextos serios como los hospitales.

«Al principio fue una labor titánica. Meter un payaso a un hospital era difícil; la imagen del payaso en Colombia no era positiva», recuerda Luz Adriana.

Convencer a los médicos no fue tarea fácil, pero lograron hacerlo mediante evidencia científica. Además, la pandemia cambió profundamente la percepción de su trabajo debido a la importancia que de manera justa se le comenzó a dar a la salud mental.

«Después de nuestras intervenciones, los niños recibían quimioterapia sin vomitar y con mejor apetito. Es maravilloso ver cómo la risa estimula el cuerpo para que responda mejor a los tratamientos… Ahora la gente entiende cuán importante es la salud mental y emocional.»

Esta transformación les abrió puertas para llegar a más lugares y demostrar la importancia de su labor, haciendo que doblegaran esfuerzos para aliviar a más niños y personas enfermas.

Un gran impacto en hospitales y comunidades

La fundación atiende a pacientes de todas las edades, en condiciones de enfermedad o vulnerabilidad. «Visitamos hospitales de estratos bajos, pero también atendemos en hospitales privados donde las familias pueden pagar, equilibrando así nuestra labor humanitaria», explica Luz Adriana. El impacto de esta iniciativa es enorme, ya que solo en 2023, atendieron a más de 59,200 personas.

Cada sesión de trabajo genera historias profundamente conmovedoras. Luz Adriana recuerda a Dana, una niña con cáncer que falleció momentos después de una sesión de risa. «La última risa que pronunció mi hija fue contigo», le escribió la madre de Dana en una carta de agradecimiento.

«Murió con la inocencia de una niña, pensando que el dolor lo causaban conejos rosados y no un tumor. Esa experiencia me enseñó que nunca sabemos cuándo la risa que provocamos será la última.»

Dentro de este tipo de historias se celebran también distintos momentos de esperanza, como el acto de tocar la campana que simboliza el fin del tratamiento contra el cáncer, tal como lo describe Luz Adriana.

«Es un acto de felicidad absoluta. Los niños reciben regalos y aplausos; es un recordatorio de que han superado un gran obstáculo.»

Cada vez que un niño toca la campana o que se puede celebrar una pequeña victoria con alguno de los pacientes con los que la fundación tiene contacto, el equipo de la Doctora Clown reafirma su compromiso con la alegría como herramienta de sanación.

El Reto de Mantener la Esperanza Viva

A pesar de los logros, mantener esta labor no ha sido sencillo para la Doctora Clown y su equipo. «Es difícil sostener una fundación en Colombia», admite Luz Adriana. Los fondos provienen de diversas fuentes: una tienda que genera el 18% de los ingresos, programas de formación para voluntarios, y talleres empresariales.

«Trabajamos la felicidad corporativa a través de pedagogía lúdica, logrando que las personas se rían, jueguen y se conecten mejor con su entorno»

La tienda de la fundación Doctora Clown es un pilar importante para recaudar fondos. Ofrecen productos como camisetas, narices de payaso y kits de mensajes positivos que inspiran a otros ciudadanos a ser parte del cambio. Este modelo de trabajo les permite mantener sus visitas regulares a los hospitales y expandir su alcance.

Voluntariados y alianzas de la Doctora Clown

La formación de los voluntarios es clave para el éxito de la fundación, ya que de esta forma se consigue que los jóvenes asuman esta hermosa labor y se generen nuevos equipos llenos de personajes portadores de risas y buena voluntad.

«Tenemos alrededor de 470 voluntarios activos a nivel nacional. Cada uno pasa por una escuela de cuatro meses donde desarrollan un personaje inspirado en su propia historia. Estos personajes son bellísimos y auténticos», comenta Luz Adriana.

Cada voluntario encuentra una manera única de conectar con los pacientes, llevando no solo alegría, sino también un mensaje de esperanza. Este tipo de transformación personal, que vive cada voluntario en su proceso para hacer parte de la fundación, fortalece el compromiso de cada miembro del equipo.

«Algunos lo hacen para superar duelos o dar gracias a la vida. Es un intercambio de amor y humanidad… Por ejemplo, un voluntario compartió cómo su personaje le ayudó a sanar un trauma de la infancia, mientras regalaba risas a los niños en un hospital.”

En paralelo, la fundación también colabora con iniciativas enfocadas en el bienestar animal. En una campaña reciente, trabajaron con «Por Amor a Rocky» para esterilizar animales callejeros y brindarles atención.

«Recuerdo un perrito que había perdido sus patas traseras. Le construyeron un carrito rudimentario para que pudiera moverse. Fue hermoso ver su felicidad al caminar de nuevo», relata Luz Adriana.

Este enfoque integral de la fundación demuestra que el impacto de la risa puede extenderse más allá de los hospitales, contagiando de solidaridad a todo ser que lo necesite.

Algunos consejos para sanar con la risa

Cuando se le pregunta sobre consejos para quienes enfrentan tristeza, Luz Adriana nos ofrece una perspectiva basada en su experiencia con el yoga de la risa, con el que evidenció lo importante que es mantenernos conectados al presente para curar las heridas que tenemos guardadas.

«Si no puedes reírte tres veces del mismo chiste, ¿por qué llorar más de tres veces por lo mismo? Escribe lo que sientes, resignifícalo y respira profundamente. La respiración consciente te conecta con el presente, y en el presente siempre estamos bien.»

Otro consejo valioso que compartir es aprender a contextualizar las emociones, ya que comunicar de alguna manera lo que vivimos y sentimos es el primer paso para entenderlo y comenzar a sanar.

«A veces, el problema se siente más grande porque no lo verbalizamos ni lo escribimos. Hablar o escribir sobre lo que nos afecta ayuda a «desdramatizar>> y entender que no es tan grave como parece», explica la Dra. Clown.

Estas herramientas simples, pero efectivas, son parte del enfoque positivo que Luz Adriana promueve a través de su fundación.

Una Invitación a Compartir Alegría

Con la meta de seguir expandiendo su impacto, la fundación Doctora Clown busca apoyo constante de la ciudadanía, que, sin importar su condición, puede aportar un granito de arena a esta iniciativa. Por ejemplo, a lo largo de su historia, la organización se ha apoyado con actores y figuras del entretenimiento para conseguir visibilidad y sorprender a sus pacientes. Actualmente, buscan contar con los medios para ampliar su capacidad y alcance con sus pacientes.

«Queremos que más niños reciban terapia de risa semanalmente. Actualmente, vamos de una a dos veces al mes, dependiendo de los recursos», explica Luz Adriana.

La fundación invita a empresas y particulares a unirse a esta causa, ya sea mediante donaciones, participación en eventos o compra de productos de su tienda.

«Nuestro sueño es simple: que la risa continúe siendo un puente hacia la esperanza y la sanación», concluye Luz Adriana.

Si quieres seguir conectado con todo lo que sucede alrededor de esta valiosa fundación y conocer más sobre la forma en la que puedes brindar tu apoyo, puedes encontrar más información en sus redes sociales, les encuentras como @doctoraclown en Instagram y Facebook, así mismo puedes buscar a su fundadora como @luzadriana_neira.z