Mi gato babea: ¿Cuál es el motivo?

La hipersalivación o el babeo en gatos puede deberse a una amplia variedad de causas, que van desde infecciones hasta estrés. Pero, ¿qué pasa cuando un gato babea excesivamente? ¿Es algo que podemos controlar nosotros mismos en casa, o se requiere de intervención veterinaria?

Hoy te mostramos todos los motivos de la salivación excesiva en gatos, y cómo tratarla en función del motivo que la ha provocado. Continúa leyendo y aprende con nosotros. 

¿Qué significa cuando un gato babea mucho?

Si un gato babea, resulta importante encontrar la causa, pues esto no es nada usual en los mininos. Si bien algunos mininos babean por el puro placer de recibir mimos, esto es poco habitual, y cuando ocurre, se da desde que son muy jóvenes. 

Otras causas poco habituales, pero que no son alarmantes, son la hierba gatera o determinados alimentos que potencien sus glándulas gustativas, como, por ejemplo: las aceitunas. 

En esos casos el gato suele salivar excesivamente, pero también restregarse contra el alimento que le provoca tal reacción, y veremos claramente que está pasándola de maravilla.

Ahora bien, cuando no hay estímulos positivos de por medio, debemos estar atentos a las posibles causas:

Envenenamiento o intoxicación

Un gato envenenado o intoxicado suele salivar de forma excesiva. Esta baba puede ser abundante, espesa e incluso espumosa. En cuanto vemos ese síntoma, debemos llevarlo inmediatamente al veterinario.

Aunque en casa mantengamos todos los químicos o sustancias tóxicas bajo control, si nuestro minino tiene acceso al exterior, puede envenenarse al alimentarse de un animal más pequeño que ha muerto por esa causa. O tal vez al escarbar en cubos de basuras. 

Tampoco debemos descartar a personas mal intencionadas que odian a los gatos, y pueden lanzarle productos tóxicos al pelaje, que los gatos procederán a limpiarse con la lengua, envenenándose inmediatamente. 

Los tratamientos externos para las pulgas y garrapatas también deben aplicarse cuidadosamente, ya que, si el gato los ingiere al acicalarse, el efecto será similar.

Alteraciones bucodentales

Una causa muy común del babeo en gatos, son los problemas odontológicos: tal es el caso de la gingivitis, estomatitis o los accesos. Cuando las encías se inflaman producto de la infección, se estimula la producción de saliva. 

Asimismo, el sarro en los dientes puede producir salivación excesiva. En esos casos, el gato suele presentar también halitosis, producto de la contaminación bacteriana. 

Todo esto requiere atención médica veterinaria, para impedir complicaciones relacionadas con una infección. Una vez solucionado el problema de base, el babeo se detendrá de inmediato. 

Trastornos de las glándulas salivales

Aunque son más extraños, algunos trastornos pueden afectar las glándulas salivales. Se debe hacer un diagnóstico diferenciado, pues la causa podría ser:

• Sialoadenitis: Se trata de la inflamación en las glándulas salivales a raíz de una infección bacteriana. 
• Tumores de las glándulas salivales: Aunque este tipo de tumores son raros, los gatos son mucho más propensos que los perros de padecerlos.
• Sialocele: Nombre dado a un quiste de retención salival en los tejidos subcutáneos o submucosos, producto de un fallo en las glándulas o conductos salivales.  

Una revisión concienzuda de la cavidad bucal, así como otros exámenes complementarios deberían ser capaces de identificar el problema específico. 

Enfermedades infecciosas

Ciertas enfermedades de fuentes infecciosas pueden provocar alteraciones, lesiones y úlceras en las mucosas de la boca del gato, causando que este hipersalive. Por lo general estas enfermedades son:

• Herpesvirus felino: Este virus es responsable de la gripe felina y la rinotraqueítis. 

• Inmunodeficiencia: El virus de la inmunodeficiencia daña y destruye los glóbulos blancos, deteriorando la función inmunológica del gato. 

• Calcivirus: Otro virus que provoca una enfermedad aguda en las vías respiratorias superiores.

Claramente, en cuanto se detectan las úlceras bucales o linguales debes llevar a tu minino al veterinario para comenzar un tratamiento inmediato en función del diagnóstico diferencial. 

Problemas esofágicos y gastrointestinales

Cuando un gato tiene problemas en el sistema digestivo, el exceso de saliva es un síntoma casi siempre presente. Puede tratarse de:

• Esofagitis: La esofagitis crónica produce lesiones inflamatorias en la submucosa. A menudo produce vómito, regurgitación y salivación.

• Tumores: Los tumores en los tejidos del esófago, estómago, etc. pueden provocar diversos síntomas, entre ellos inapetencia, apatía y otros. 

• • Úlcera gástrica: La gastritis en gatos se manifiesta a través de vómitos, pérdida de apetito, diarrea, debilidad, sangre en las heces y babeo excesivo. 

• Megaesófago: Aunque es una patología menos frecuente en gatos que en perros, provoca distensión del esófago, y su signo clínico más frecuente es la regurgitación de alimento. 

• Obstrucción esofágica por tricobezoares: Cuando las bolas de pelo que ingiere el gato obstruyen el esófago, este trata de vomitar para deshacerse del tricobezoar, pero sólo logra salivar en exceso.

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Enfermedades metabólicas

Algunos trastornos metabólicos también pueden ser la causa del babeo excesivo en gatos:

• Insuficiencia renal: Los gatos enfermos de los riñones presentan síntomas como vómitos, pérdida del apetito, letargo, diarrea, disminución o ausencia de orina, descoordinación, etc. 
• Hepatoencefalopatía: Una enfermedad en que los riñones o el hígado no son capaces de eliminar las sustancias nocivas de la sangre, y estas se desvían al cerebro, provocando una salivación excesiva. 

Trastornos neurológicos

Si bien la saliva se produce y secreta desde las glándulas salivales, en algunas ocasiones el sistema nervioso puede excitar estos núcleos salivales. 

De manera que ciertos trastornos que afectan el funcionamiento neurológico, podrían causar salivación excesiva: tal es el caso de la rabia, el botulismo, la parálisis del nervio facial o trastornos vestibulares. 

Estrés

Aunque no todos los gatos estresados babean, no se puede negar que estos animalitos son muy vulnerables al estrés y a estados de nerviosismo intenso. Algunos gatos babean cuando se les lleva al veterinario, cuando se exponen a ruidos fuertes, o situaciones totalmente nuevas sobre las que no tienen control. 

Una vez descubierto el foco que produce el estrés, y controlado, el gato debería volver a la normalidad.

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Dudas frecuentes sobre el babeo excesivo en gatos

Como no es un comportamiento habitual en los mininos, muchos dueños tienen dudas acerca del babeo en gatos, especialmente cuando se acompaña de otros síntomas, o al aparecer luego de una situación específica.

Te traemos a continuación las más frecuentes: 

¿Por qué mi gato babea después de desparasitarlo?

Medicar a un gato es bastante complicado, sobre todo cuando se trata de pastillas y jarabes. Cuando logramos medicarlos por nuestra cuenta, seguramente lo verás babear por toda la casa debido al desagrado que le produce el sabor del fármaco. 

Sin embargo, este babeo debe desaparecer después de un rato. De persistir, es probable que tu gato se haya intoxicado, por lo que deberás llevarlo a que lo revise el veterinario.   

¿Por qué mi gato babea y tiene mal olor?

Los problemas de sarro en la dentadura felina suelen venir aparejados a la halitosis (mal aliento) y la hipersalivación. Otros trastornos odontológicos pueden ser la causa, por eso debes llevar a tu gato al veterinario para tratar la causa específica. 

¿Por qué mi gato babea cuando lo acaricio?

Como mencionábamos anteriormente, algunos gatos pueden babear al ser mimados y acariciados. Esta es una respuesta al estímulo como tal, y no representa ningún tipo de problema.

¿Por qué mi gato babea cuando duerme?

Si tu gato babea un poco, y solo mientras duerme, no te asustes. Algunos gatos pueden secretar pequeñas cantidades de saliva durante las etapas más profundas del sueño, que habitualmente ingieren, aunque no siempre es así: depende de cuán relajado se encuentre tu minino al dormir. 

¿Por qué mi gato babea mucho y está decaído?

Son muchas las causas que pueden hacer a un gato babear de forma excesiva, padecimientos como la leucemia felina, la inmunodeficiencia y la insuficiencia renal pueden combinar tanto la salivación como el decaimiento. 

Por tanto, un diagnóstico temprano es necesario, no solo para solucionar el babeo, sino más importante aún, para controlar la enfermedad subyacente, que podría ser mortal. 

¿Por qué mi gato babea mucho y no come?

Los gatos son criaturas muy sensibles, y si algo les produce salivación en exceso, posiblemente se nieguen a comer por el asco que les produce la propia ingestión de saliva. También podría tratarse de un objeto extraño en su boca o esófago, que le impida tragar e incluso le provoque dolor. 

Si tu gato no come, y además babea mucho, lo mejor es que acudas de inmediato a un especialista.

Esperamos que después de leer este artículo hayas aclarado tus dudas relacionadas con el babeo frecuente en tu gato. Sin embargo, debes saber que este artículo es informativo y en el Blog de Agrocampo no contamos con autoridad para dar diagnósticos veterinarios.

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