Se acaban los sacrificios de animales en rituales religiosos en Bélgica

La protección del bienestar animal ganó otra batalla el pasado martes 13 de febrero, cuando el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), con sede en Estrasburgo, Francia, avaló la prohibición de los ritos musulmanes y judíos halal y kosher. ¡Esta es la historia!

¿Qué dice la ley de bienestar animal en Bélgica?

En las regiones belgas de Flandes y Valonia ya estaba establecida una ley de bienestar animal desde el año 2019, siete organizaciones no gubernamentales y 13 personas, en representación de las comunidades judías y musulmanas belgas.

Estas comunidades interpusieron una demanda contra Bélgica argumentando que se estaba vulnerando la libertad religiosa y de culto al emitir un fallo que prohibiera prácticas religiosas sagradas que han pasado por generaciones.

La ley de Bienestar Animal de Bélgica estaba vigente desde el 1 de enero de 2019 en Flandes, y desde el 1 de junio de 2019 en Valonia, región en la que se estableció un período de transición de tres meses para eliminar estos rituales.

¿Cómo son estos rituales religiosos?

Las prácticas halal y kosher, de las comunidades musulmanas y judías respectivamente, exigen la muerte de los animales sin aturdimiento, según las costumbres religiosas explicadas en el Corán y la Torá.

El ritual de sacrificio musulmán exige un corte en el cuello del animal con un objeto cortopunzante afilado mientras mira hacia La Meca y el rabino alaba a Alá. Cuando el animal se desangra se considera digno para la alimentación de la comunidad.

El ritual judío tiene algunas variaciones, pero también debe hacerse con un corte sin haber sedado o aturdido al animal antes. Para la realización de este sacrificio, en ambas religiones, el animal debe estar en perfecto estado de salud.

Tradición religiosa vs Bienestar animal

La lucha por el cuidado animal en esta región viene de varias décadas atrás, ya que en Bélgica se prohibió desde 1986 que los animales vertebrados pudieran ser sacrificados sin ser anestesiados o aturdidos para evitar provocar dolor, angustia, miedo u otras formas de sufrimiento a los animales. Se establecieron como excepciones la fuerza mayor y los sacrificios religiosos.

Para el año 2014, luego de una reforma, la normativa de bienestar animal dejó de ser competencia del estado federal y pasó a ser un ámbito regional. Pero los judíos belgas no tomaron bien la nueva ley y llevaron el caso ante el Tribunal Constitucional belga, declarando que la consideraban como el mayor asalto a la comunidad judía desde el genocidio nazi.

En 2022, nuevamente, tanto personas como instituciones religiosas musulmanas y judías expusieron un recurso solicitando la revisión judicial de los decretos flamenco y valón en el TEDH, apelando a la discriminación religiosa y cultural, pero no tuvieron éxito.

Es así como la alianza que habían tejido los musulmanes y los judíos de Bélgica para que la Unión Europea permitiera el sacrificio de los animales sin aturdimiento previo, siguiendo los preceptos de los ritos halal y kosher, perdió su última batalla.

Judgment Executief van de Moslims van België and Others v. Belgium – Ban on ritual slaughter of animals without prior stunning in Flemish and Walloon Regionshttps://t.co/H8pxDBCtM3#ECHR #CEDH #ECHRpress pic.twitter.com/0cfd5OPejZ

— ECHR CEDH (@ECHR_CEDH) February 13, 2024