Cálculos renales en gatos ¿Qué son y cómo eliminarlos?

¿Tu gato muestra signos de malestar al orinar o ves cambios en su comportamiento? Entonces es posible que se esté enfrentando a un padecimiento relativamente común como son los cálculos renales en gatos.

Estos pequeños cristales, también conocidos como urolitos o «piedras» en los riñones, pueden causar malestar a tu felino, afectando su bienestar y calidad de vida. Pero no te preocupes, estamos aquí para guiarte con esta situación.

En este artículo, exploraremos qué son los cálculos renales en gatos, los diferentes tipos, sus posibles causas y, lo más importante, cómo eliminarlos. ¡Quédate hasta el final para que puedas asegurar la mejor calidad de vida para tu mascota!

¿Qué son los cálculos renales en gatos?

Los cálculos renales en gatos, también conocidos como urolitiasis o piedras en los riñones, son formaciones cristalinas que pueden surgir en diversas partes del sistema urinario de tu felino.

Estas estructuras sólidas se clasifican en dos categorías principales según su ubicación:

• Cálculos del tracto urinario inferior (afectando la vejiga y uretra).
• Cálculos del tracto urinario superior (presentes en riñones y uréteres).

Además de su ubicación, estos cálculos se clasifican según el tipo de mineral que los compone.

• La estruvita que tiende a formarse cuando la concentración de magnesio en la orina es elevada.
• El oxalato cálcico que se desarrolla en ambientes urinarios demasiado ácidos y ricos en calcio.

Estos minerales se agrupan y cristalizan, generando obstáculos en las vías urinarias de tu gato, ocasionando molestias y complicaciones en su salud.

Tipos de cálculos renales

Ahora que entendemos qué son, es momento de conocer los tipos de cálculos renales en gatos que puede estar padeciendo tu minino.

Cálculos de estruvita

Los cálculos de estruvita son formaciones cristalinas compuestas principalmente de fosfato amónico magnésico hexahidratado. Estos cristales se pueden acumular en el tracto urinario de los gatos, incluyendo la vejiga y la uretra, provocando dolor y molestia en nuestras mascotas.

La estruvita se forma cuando la orina se sobresatura con magnesio, amonio y fosfato, y el pH de la orina es superior a 6,5.

Es importante destacar que, a diferencia de algunos casos en perros, la mayoría de los urolitos de estruvita en gatos son estériles.

Oxalato de calcio

Los oxalatos de calcio son un tipo específico de cristales que pueden desarrollarse en la orina de los felinos. Estos cristales están compuestos por oxalato cálcico y pueden contribuir a la formación de cálculos renales.

La incidencia de estos cálculos ha aumentado en gatos. Se les ha relacionado con el uso generalizado de dietas bajas en magnesio y acidificantes para controlar los urolitos de estruvita, aunque también son generados por otras causas como:

• Hiperabsorción gastrointestinal.
• Aumento de la excreción renal de calcio y oxalato.

A diferencia de los cálculos de estruvita, los de oxalato cálcico presentan factores de riesgo diferentes. La edad media de diagnóstico es alrededor de 7,8 años, y el riesgo aumenta con el paso de la edad.

Causas de la formación de cálculos en los gatos

Hemos visto algunos de los factores de riesgo que pueden generar los diferentes tipos de cálculos renales en gatos, ahora es el momento de conocer las causas más comunes:

Dieta

La dieta juega un papel crucial, ya que una alimentación con exceso de magnesio puede propiciar cálculos de estruvita, mientras que una dieta ácida se asocia con la formación de cálculos de oxalato cálcico.

Enfermedades y estilo de vida

Las infecciones urinarias también desempeñan un papel importante, porque muchas bacterias provocan la acidificación de la orina, contribuyendo así a la formación de cálculos.

Enfermedades urinarias o vasculares, así como otras condiciones que aumentan los niveles circulantes de magnesio o calcio, como neoplasias o hiperparatiroidismo, también han sido relacionadas con la urolitiasis en gatos.

Además, la alteración de la flora intestinal, la obesidad y el sedentarismo son factores que pueden aumentar la predisposición de un gato a padecer cálculos renales.

Genética y sexo

Aunque no se consideran causas directas, existen factores genéticos que predisponen a ciertas razas, como la persa e himalaya, a sufrir esta condición.

De igual forma, se ha demostrado que las diferencias sexuales pueden ser determinantes, ya que los machos tienen mayor predisposición a cálculos de oxalato cálcico y las hembras a cálculos de estruvita.

Principales signos de urolitiasis

Detectar la presencia de cálculos renales en gatos es fundamental para abordar esta condición a tiempo. Los signos de urolitiasis pueden variar, y en muchos casos, los cálculos se descubren durante el diagnóstico de otras enfermedades.

Sin embargo, algunos síntomas indicativos incluyen:

• Hematuria: la detección de sangre en la orina.
• Comportamiento inadecuado de eliminación de residuos, como orinar fuera del arenero.
• Aumento en la frecuencia de micciones con una cantidad reducida de orina.
• Micción dolorosa y en pequeñas cantidades, indicando dificultad o dolor al orinar.
• Disminución o falta de apetito.
• Pérdida de peso no explicada.
• Niveles de inactividad y fatiga inusuales.

Si observas alguno de estos síntomas en tu gato, es crucial acudir a un veterinario de confianza lo antes posible. Un diagnóstico temprano y un plan de tratamiento adecuado son claves para restaurar la salud y la felicidad de tu compañero felino.

¿Cómo eliminar los cálculos renales en gatos?

Cuando se enfrenta a la presencia de cálculos renales en gatos, es esencial conocer las diversas pautas de tratamiento para abordar esta condición de manera efectiva, aquí te presentamos algunas estrategias:

Terapia farmacológica

La terapia farmacológica puede involucrar el uso de diuréticos, como el hidroclorotiazide, que ayudan a aumentar la producción de orina y favorecer la eliminación de los cristales.

Además, se suelen recetar antiinflamatorios y relajantes musculares para aliviar la inflamación y facilitar el paso de los cálculos. Y, en caso de detectar una infección urinaria, el veterinario puede recomendar la administración de antibióticos.

El tratamiento farmacológico para cálculos de oxalato cálcico en específico, implica el uso de citrato, diuréticos tiazídicos y vitamina B6.

Aumento del consumo de agua

Un alto consumo de agua permite diluir la concentración de minerales en la orina y prevenir la formación de cálculos. Por ello, los expertos aconsejan introducir alimentos húmedos en la dieta o proporcionar acceso constante a agua limpia y fresca.

Intervención quirúrgica (en casos más graves)

En situaciones más severas o cuando los cálculos son de considerable tamaño, la intervención quirúrgica puede ser necesaria.

Mediante métodos como la urohidropropulsión, que utiliza técnicas de rotura mecánica, o procedimientos quirúrgicos para la extracción de cálculos, es posible extraer los cristales. Sin embargo, estos enfoques más invasivos se reservan para casos donde otras opciones no son viables.

Dieta medicada

La dieta específica desempeña un papel crucial en el tratamiento de cálculos renales en gatos. En estos casos, se prescriben alimentos terapéuticos diseñados para disolver ciertos tipos de cálculos o prevenir su formación.

La elección de la dieta para gatos con cálculos renales dependerá del tipo de cristales presentes en el sistema urinario. Por ejemplo, en los cálculos de estruvita se ha demostrado la eficacia de una dieta específica, baja en magnesio, acidificante y enriquecida con sodio, con el fin de disolver estos cristales en un período promedio de 26 a 34 días.

Tratamiento preventivo y seguimiento

Además de estas pautas, es fundamental seguir un tratamiento preventivo después de la eliminación de los cálculos, que incluye seguimiento regular mediante análisis de orina, radiografías o ultrasonografías periódicas.

Como ves, la aproximación a los cálculos renales en gatos va más allá de la atención clínica, implica una comprensión profunda de las causas, la detección temprana de síntomas y la implementación de estrategias efectivas.

Con esta información en tus manos, podrás encarar los desafíos y particularidades que conlleva este padecimiento, con el objetivo de garantizar el bienestar general de tu mascota.