¿Cómo hacer que un gato no chupe las cobijas? ¡Paso a paso!
miércoles 28 febrero, 2024
Nuestros michis siempre nos sorprenden con conductas extrañas pero divertidas, sin embargo, debemos estar atentos a estas, porque pueden ser un signo de alerta de problemas de salud o enfermedades.
Lamer o chupar las cobijas puede ser un comportamiento normal en gatitos bebés y un poco menos frecuente en gatos adultos. Aquí te explicaremos lo que debes tener en cuenta de esta conducta, cuando puede empezar a causar problemas y, por último, cómo hacer que un gato NO chupe las cobijas.
¡Continúa leyendo para más detalles!
¿Por qué mi gato chupetea las cobijas?
La única acción que desarrollan los animales en sus primeras horas de vida es la succión, buscando a través de su olfato a su madre para poder alimentarse. A medida que crecen, usan sus paticas para estimular mejor la salida de leche materna, acción que suele conocerse como amasar.
Ambas acciones llegan a los seis meses y desaparecen en la medida en que crecen, pero algunos gatos lo desarrollan como un hábito permanente, especialmente si se les separa de la madre antes de tiempo.
Si bien la conducta en sí misma no es perjudicial, es importante observar si este comportamiento se vuelve excesivo o compulsivo, ya que podría indicar niveles elevados de ansiedad.
¿Qué situaciones pueden promover el hábito de chupar las cobijas en mi gato?
Es importante detectar a tiempo si nuestro gato tiene o no la conducta de chupar mantas de lana y corregirla, pues, aunque no cause ningún daño a corto plazo si puede suceder que, con el paso del tiempo genere algún problema.
Este hábito tan particular, es también conocido como «pica» y puede tener causas tan diversas que van desde factores emocionales hasta problemas de salud del gatito. Debido a esto, es crucial entender las situaciones que podrían promover este comportamiento para abordar esas necesidades y garantizar el bienestar de nuestro felino compañero.
Algunas de las causas de que un gato chupe las cobijas son:
Destete temprano
El periodo de lactancia es muy importante en los gatitos, ya que a través de la leche materna adquieren todos los anticuerpos que los mantendrán protegidos durante sus primeras semanas de vida, hasta que la comida sólida le brinde más nutrientes.
La edad ideal para el destete materno se dará entre las 8 y 10 semanas. Aquí ya habrá iniciado su período de socialización con otros gatos, otras especies y su entorno. Es vital realizarlo en la semana correcta para evitar problemas de conducta o salud más adelante.
Estrés
Los gatos son animales muy apegados a sus rutinas, por lo que cualquier alteración puede causarles estrés. Por ejemplo, factores como las mudanzas, visita de personas desconocidas, nuevas mascotas en el hogar entre otras situaciones con las cuales se sienten amenazados.
Tus peluditos pueden reaccionar al estrés de diversas maneras, y una de ellas es mediante comportamientos compulsivos o calmantes como la succión de objetos blandos, debido a que lo devuelve a la tranquilidad de su período de cachorro lactante.
Aburrimiento
A pesar de ser animales mucho más independientes que los perros, los gatos también requieren ejercicio y atención de sus dueños, así como un entorno adecuado a sus necesidades de entretenimiento y descanso.
La variedad y la estimulación son clave para mantener a los gatos felices y activos utilizando juguetes interactivos y dedicándoles tiempo de calidad a su juego e interacción con él, esta actividad contribuye al fortalecimiento de la relación mascota-humano.
Problemas de salud
Algunas enfermedades o patologías de los gatos pueden tener como síntoma la necesidad de chupar mantas, lana o fibra natural, por la sensación de calma o la acción de masticar permanentemente para obtener saciedad.
Problemas orales, cargas parasitarias o enfermedades crónicas que afecten la absorción de nutrientes pueden generar la necesidad de consumir cualquier tipo de objeto o material no comestible.
¿Por qué debo evitar que mi gato chupe las cobijas u otras prendas?
Esta conducta puede ser normal e incluso natural en los primeros meses de vida de nuestro gatito, pero debemos estar atentos si pasados los seis meses continúa la conducta ya que se puede convertir en algo compulsivo y permanente.
Se considerará perjudicial y debe evitarse cuando, no solamente sea chupar las fibras o cobijas, sino también, rasparlas hasta deshilacharlas e incluso, empezar a ingerir hilos o pedazos, porque se pueden generar obstrucciones intestinales o problemas digestivos.
La situación puede agravarse considerablemente si el gato tiene la preferencia de chupar materiales como plástico, madera o plantas, ya que estos elementos pueden ser potencialmente tóxicos o provocar cortaduras en el tracto digestivo.
Las 7 alternativas para hacer que un gato no chupe las cobijas
Si ahora te encuentras indagando sobre cómo hacer que un gato no chupe las cobijas, aquí encontrarás información precisa, ya que tenemos diferentes opciones para ayudar a tu michi a eliminar o evitar esta conducta.
1. Juguetes interactivos
La curiosidad y la inteligencia de los gatos no tiene límites, por esto los juegos que estimulan su lado depredador contribuyen a su trabajo y ocupación mental a través de la activación de todos sus sentidos a la hora de jugar.
Juegos interactivos para gatos como los puzles, comederos didácticos, plumas y circuitos son algunos de los productos disponibles en el mercado para contribuir a la diversión en casa de tu gato y disminuir comportamientos no deseados.
2. Juguetes con textura de lana o fibras
Los gatos son animales con una alta sensibilidad y percepción de su entorno, por esta razón es que los diferentes tipos de texturas ya sea en sus cobijas, los muebles o la lana de la ropa de sus humanos les llaman la atención.
Elegir juguetes con texturas o fibras, especialmente diseñado para la diversión felina, ayudan a mantenerlos enfocados, mejorar su agilidad mental y evitar su interacción con fibras similares, pero en espacios donde pueden causar daños.
3. Dieta rica en fibra
Una alimentación rica en fibra beneficia el sistema digestivo al favorecer la absorción eficiente de nutrientes y facilitar la eliminación de desechos.
Además, una dieta rica en fibra favorecerá la saciedad, por ende, si la causa del acto de chupar y morder las mantas se da por la necesidad de buscar sensación de calma, podrá ser efectiva esta alternativa. Asegúrate que su alimento contenta fuentes de fibra como pulpa de remolacha, psyllium, entre otras.
4. Incluye lechuga u otros alimentos crujientes en su dieta
Este alimento es agradable tanto al tacto como al gusto de tu gato, especialmente la lechuga romana.
La textura del vegetal es aún más agradable que cualquier tipo de fibra y por eso su consumo frecuente puede disminuir la conducta de chupar cobijas. También puede probarse con la piel de la papa o los guisantes. Eso sí, asegúrate de lavarlas muy bien.
5. Cambio frecuente de aromas
Una de las razones por las que más disfrutan chupar fibras o cobijas es por el olor. El aroma de sus humanos o el suyo propio les generan una sensación de calma, pertenencia y sentido de manada.
Por esta razón, la rotación de olores fuertes o el cambio de aroma con el lavado frecuente pueden resultar efectivos para disminuir la conducta de chupar cobijas. Puedes utilizar un atomizador con vinagre de manzana sobre las telas, aguas de lino, otros aromas o lavar más seguido la ropa.
6. Distraerlo de las cobijas y/o fibras de su gusto
Sin duda, mantenerlo lejos de las cobijas o fibras que le gustan es la primera acción a realizar. En el momento en que empiece a chupar la cobija debemos retirarla de su alcance para no estimularlo y luego distraerlo con juegos o con una ronda de mimos y cariños.
Por último, ten presente que los gatos aprecian los ambientes libres de exceso de ruidos o personas desconocidas, por lo que hay que garantizar su calma en el hogar y adecuar espacios exclusivos para su diversión y descanso.
Situaciones con altos niveles de estrés y con cambios muy frecuentes de rutina o personas pueden llevarlos a conductas como chupar cobijas u otras que impliquen agresividad. Incluso también, convertirse en comportamientos compulsivos difíciles de controlar.
Ahora que cuentas con más información sobre las posibles razones de esta conducta, así como las formas de hacer que un gato NO chupe las cobijas, solo sigue evaluar a tu peludo y probar estas alternativas para identificar una que le pueda funcionar.
Recuerda que, aunque chupar las cobijas no es una conducta peligrosa, si no se controla puede tener consecuencias a largo plazo. No olvides acudir a tu médico veterinario de confianza, en caso de requerirlo.
No olvides ingresar a nuestro hipermercado online para adquirir los mejores productos para tu mascota y visitar nuestras redes sociales para estar al tanto de más contenido sobre el cuidado de tu michi.
Revisado por:
Luis Alberto Enciso López
Médico Veterinario Zootecnista
Matrícula Pofesional No. 12415