Buenas Prácticas Ambientales en Colombia, ¿qué son las BPAS?
miércoles 25 octubre, 2023
Para nadie es un secreto que el cambio climático afecta a los más de 8 mil millones de personas que habitan en el planeta tierra. No obstante, cada vez son más quienes están conscientes de lo grave que se encuentra el planeta debido a la crisis ambiental.
Colombia es uno de esos países que poco a poco ha ido entendiendo que se necesita aportar, de un granito de arena, para tener un planeta y desarrollo sostenible. Y la respuesta por parte del gobierno nacional para lograrlo ha sido la definición e implementación de las “Buenas Prácticas Ambientales”. ¡Conoce más de esto aquí!
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¿Qué son las Buenas Prácticas Ambientales?
Las Buenas Prácticas Ambientales son las acciones que se realizan para reducir el impacto ambiental, el cual es causado por las actividades y procesos de deforestación y contaminación. Para lograr esto, se necesitan hacer mejoras en las organizaciones, cambios y desarrollo de sus acciones.
El bajo costo de estas prácticas, y lo simple que son para ejecutarlas, logran que se obtengan rápidos resultados. En pocas palabras, son recomendaciones útiles que ayudarán a mejorar ciertos comportamientos habituales, ejecutadas mediante fáciles alternativas de consumo de recursos y manejo de desechos.
Objetivos de las BPAS
Implementar Buenas Prácticas Ambientales es algo totalmente útil, puesto que se logra reducir el impacto ambiental negativo con ideas simples y a bajo costo. Sin embargo, todo va a depender de las actitudes y actividades que realice cada uno de los trabajadores en una organización.
Gracias a su baja inversión, su rentabilidad es alta. Además, no afecta los procesos, lo que hace que estas prácticas sean aceptadas, logrando un objetivo esencial: el desarrollo sostenible. No obstante, otros de sus objetivos son:
- Disminución en el consumo y coste de los recursos (agua, energía, etc.).
- Disminución en la cantidad de residuos producidos y facilitar su reutilización.
- Reducción de las emisiones a la atmósfera, los ruidos y los vertidos de aguas.
- Mejorar la competitividad de la empresa.
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Buenas Prácticas Ambientales según el consumo de recursos
Este tipo de prácticas están divididas de acuerdo al consumo que se hace de los diferentes recursos, por lo que es indispensable conocer cómo aplicarlas en cada uno de ellos. A continuación, las conocerás.
1. Consumo de agua
Todos sabemos que el agua es un recurso natural indispensable para poder vivir, pero también hay que saber que se trata de un recurso escaso. Hoy en día, el consumo de agua ha ido aumentando de forma acelerada. Aunque se podría considerar como un recurso renovable, su calidad también va disminuyendo debido a la contaminación, lo que ha originado problemas de escasez de la misma.
Algunas prácticas para que los trabajadores ahorren agua en las empresas son:
- Evitar dejar grifos abiertos mientras se enjabonan las manos o cepillan los dientes.
- Hacer más uso de limpieza manual con escoba, en lugar de lavar los espacios con manguera.
- Para los jardines, los riegos deben ser ajustados a periodos de tiempo.
- Si existen fugas, goteos o funcionamiento incorrecto, se debe comunicar al responsable de mantenimiento.
- La cadena del sanitario solo se debe tirar cuando sea necesario.
- No arrojar al desagüe toallas sanitarias, tampones, papeles, pañales, colillas, aceites, sustancias químicas o sustancias que eviten el buen funcionamiento de las plantas de agua.
2. Energía
Otro de los recursos que se puede controlar en una oficina es el consumo de energía. Cada vez son más los aparatos electrónicos que se emplean, por lo que tiene un aumento considerable en los consumos, lo que se traduce en más gastos. Algunas de las prácticas que se pueden realizar para reducir el consumo energético son:
- Equipos de oficina: Los aparatos electrónicos tienen que configurarse en “ahorro de energía”. Además, se deben apagar ordenadores, impresoras y demás aparatos eléctricos al momento de finalizar la jornada de trabajo. Asimismo, el ordenador debe apagarse si se deja de utilizar por más de una hora, mientras que sus alimentadores de corriente también deben ser desconectados. Por otro lado, los equipos de refrigeración tienen que revisarse con regularidad, para detectar si hay pérdidas de energía.
- Climatización: Se recomienda hacer uso de la regulación natural de la temperatura, es decir, evitar encender el aire acondicionado, a menos que sea necesario. Apagar, o poner al mínimo, los sistemas de calefacción o aire acondicionado en salas que no se mantengan en uso. Asimismo, tener una temperatura entre 20°C y 24°C, de manera que se disminuya el consumo energético. De igual modo, programar los equipos de climatización para que solo funcionen en las jornadas de trabajo.
- Iluminación: Evitar encender las luces mientras no sea necesario, se recomienda abrir ventanas y persianas para aprovechar la iluminación natural.
3. Materiales e insumos
Algunas prácticas que se pueden ejecutar para reducir el papel, materiales y otros recursos son las siguientes.
- Papel: Siempre que se pueda evitar su uso. Lo mejor es mantener todos los documentos en formato digital, compartiendo la información a los empleados a través del correo electrónico, la Intranet, teléfono, entre otros. Asimismo, hacer uso del papel reciclado en la medida de lo posible, ya que este sí es válido. Por otro lado, se debe evitar imprimir documentos que no sean necesarios y tengan mucho espacio, como lo son las presentaciones en PowerPoint.
- Material de oficina: Los tóneres y las pilas gastadas son residuos peligrosos, por lo que deberán desecharse, si no pueden ser reutilizados, en el recipiente de color rojo destinado para tal fin. Asimismo, es vital reutilizar los recursos ya utilizados y que son desechables, de manera que se les puedan dar otros usos, como cajas, material de encuadernación o carpetas. En cuanto a la limpieza, lo mejor es escoger productos químicos que sean menos agresivos con el medio ambiente, es decir, productos biodegradables, menos tóxicos, que tengan pH neutro, sin fosfatos, entre otros.
4. Generación de residuos sólidos
Siempre que se pueda, los residuos deben ser separados en su lugar de origen, siendo depositados en diferentes contenedores que estén habilitados para tal fin, siendo separados de forma correcta y de acuerdo a sus características o tipos de residuos producidos. Al hacer esto correctamente, se evita la contaminación y se facilita su aprovechamiento. Para estas prácticas se emplea la estrategia de las “3R’s”: reducción, reutilización y reciclaje.
Si esta estrategia se cumple, se podrá reducir en gran medida los recursos naturales que son utilizados como materia prima, lo que permite que haya más probabilidades de tener un sistema cíclico de reciclaje, evitando el agotamiento de los recursos naturales y asegurando que se sigan manteniendo en las futuras generaciones.
5. Generación y manejo de residuos biológicos
Los recursos biológicos se utilizan en cantidades moderadas. Sin embargo, también se deben adoptar prácticas para su uso, tratamiento y desecho. Estos residuos según la OMS se dividen en las siguientes categorías:
- Desechos infecciosos: desechos que se cree contienen patógenos para causar enfermedades, como materiales, tejidos o fluidos contaminados con sangre de personas infectadas.
- Desechos patológicos: parte del cuerpo, órganos, tejidos, sangre, fetos, fluidos corporales o cadáveres animales.
- Cortopunzantes: materiales que causen pinchazos o cortes.
- Desechos farmacéuticos: vacunas, drogas, sueros y productos farmacéuticos que ya estén expirados, así como materiales que se usen para su manipulación, como envases con residuos, guantes, etc.
- Desechos genotóxicos: aquellos desechos que tengan propiedades mutagénicas, teratogénicas o carcinogénicas.
- Desechos químicos: son peligrosos si poseen tóxicos, corrosivos, inflamables, reactivos o genotóxicos. Estos pueden ser sólidos, líquidos o gaseosos.
- Desechos con alto contenido en metales pesados: Se trata de instrumentos que tengan mercurio, como termómetros, esfigmomanómetros.
- Contenedores presurizados: latas con aerosoles, puesto que pueden llegar a explotar por el calor o al ser puncionadas de forma accidental.
- Desechos radioactivos: todo material contaminado con radionúclidos de fuentes abiertas.
Gran impacto ambiental
Implementar estas prácticas en las organizaciones tiene un gran impacto, y no solo ambiental, sino también en la mejora de la empresa hacia los proveedores, clientes y comunidad en general, provocando en todas las personas un sentido de pertenencia y creación de hábitos.
Gracias a estas Buenas Prácticas Ambientales, la conciencia ambiental aumentará en gran medida, lo que se verá reflejado en toda la sociedad colombiana, logrando tener un desarrollo sostenible.
Fuentes
- Carrera, B. D. C., Velásquez Rodríguez, O. E., Rentería, C. E., Meneses, L. M., Rubio, R. G., Andrés Tovar, C., Ángela, L., Agudelo, M., Fernando, A., & Oyola, H. (s/f). SENADO DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA DIRECCIÓN GENERAL ADMINISTRATIVA VERSION 2 MANUAL DE BUENAS PRÁCTICAS AMBIENTALES. Gov.co. Recuperado el 27 de octubre de 2023, de URL.
- De, O. (s/f). GUÍA DE BUENAS PRÁCTICAS AMBIENTALES. Promocionsocial.org. Recuperado el 27 de octubre de 2023, de URL.
- GRUPO APOYO ADMINSITRATIVO -PLANEACIÓN -GESTIÓN AMBIENTAL Código: PL-AM-MA-001 Versión: 2 MANUAL DE BUENAS PRÁCTICAS AMBIENTALES Y EFICIENCIA ADMINISTRATIVA. (s/f). Gov.co. Recuperado el 27 de octubre de 2023, de URL.
Revisado por:
Luis Alberto Enciso López
Médico Veterinario Zootecnista
Matrícula Pofesional No. 12415