Indignante caso de crueldad animal hacia un perrito en China

Agronotas

miércoles 13 diciembre, 2023

Lo que en principio parecía una terrible picadura de abeja o una condición congénita por alguna enfermedad resultó ser un doloroso caso de maltrato animal al que se vio enfrentado un perrito en un barrio en China.

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¿Cuál es su historia?

Varios vecinos de la zona quedaron impactados por la condición física del perrito que deambulaba por ahí, era muy difícil no percatarse de su cabeza gigante además de notar que no tenia un dueño o lugar fijo a donde ir.

El tamaño de su cabeza alerto a las personas y al identificar que era abandonado contactaron a unos veterinarios de una zona alejada pero expertos en perros callejeros para atender este caso.

Debido a las situaciones sufridas por el peludito, él se escondía muy bien por el barrio para no hacerse notar por ningún humano, era bastante huidizo y nervioso.

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Un rescate difícil

Los veterinarios estuvieron varias horas detrás de su paradero para poder atenderlo pero cada vez que estaban cerca de atraparlo él lograba escaparse y correr muy rápidamente, por esas reacciones empezaron a sospechar de una situación terrible de maltrato.

Finalmente pudieron encontrarlo en un callejón alejado del barrio donde nuevamente quiso escapar pero tuvieron que tomar una medida necesaria la cual era dispararle un sedante para que no corriera más.

Cuando pudieron acercare con el perro inmóvil pudieron darse cuenta que su cabeza no era asi por ninguna enfermedad o picadura, era una cuerda que apretaba horriblemente su cuello impidiendo la circulación de líquidos y dejándolos estancados en su cabecita.

Su anterior dueño lo había dejado amarrado en algún lugar para luego abandonarlo y el perrito en su deseo de sobrevivir forcejeo para poder desamarrarse aunque lo logro eso hizo que la cuerda se apretara aún más a su cuello causándole esta lesión.

Una larga pero increíble recuperación

Fue trasladado rápidamente al centro veterinario para poder retirarle la cuerda sin lastimarlo aún más, ya que ésta había causado una grave herida donde el cuello estaba completamente expuesto a carne viva.

Mientras le era retirada la cuerda pudieron notar algunas partes de alambre dentro de ella lo que lastimaba aún más su cuello, luego tuvieron que limpiar minuciosamente la herida para iniciar las curaciones necesarias.

Poco a poco el tratamiento fue surgiendo efecto no solo para bajar la hinchazón de su cabeza sino también para permitirse recibir el cariño y el amor de los veterinarios que lo trataban.

Afortunadamente sobrevivió y luego de una exitosa recuperación encontró un hogar donde nunca jamás recibiría los maltratos y los daños que le causaron en el pasado. Recibió el tierno nombre de Abejita.

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