Un gato sobrevivió a la perdida de sus ojos y pudo encontrar un nuevo hogar

Una historia de resiliencia que hay que contar. Estar en las calles todos los días es un reto para los animales, perros y gatos, expuestos a los peligros y a la desatención, pero Stevie tendría una gran historia por contar. ¡No dejes de leer!

La historia de Stevie

Un pequeño gato color naranja le tocó enfrentarse a diferentes peligros para sobrevivir, sin embargo, como dice el dicho popular: “no hay mal que por bien no venga”, ahora este peludo está viviendo su mejor vida posible, sin dejar que sus problemas de salud le afecten.

Esta es la historia de Stevie, un felino que fue llevado a un refugio de animales porque estaba en muy mal estado físico, presentaba signos de debilidad, desnutrición y una infección en sus ojos.

Pero, afortunadamente, se encontraron con el albergue SpokAnimal en Washington, donde le dieron la ayuda que él necesitaba debido a sus complicaciones de salud. Lo atendieron de manera urgente.

“La gente de nuestro refugio local vio el valor de su vida y lo salvaron. Le realizaron una cirugía que le salvó la vida para extirparle ambos ojos y me preguntaron si me gustaría acogerlo”.

Stevie robo su corazón y él le daría un hogar y un amigo

Myers no dudó en darle la bienvenida a su casa. Desde su llegada, su nuevo tutor estuvo totalmente involucrado, alimentando al gato con una jeringa hasta que estuvo lo suficientemente fuerte como para comer solo.

Luego de la operación de Stevie, su recuperación fue evolucionando de la mejor manera. Ganó fuerzas, empezó a comer de forma independiente y empezó a explorar su nuevo mundo.

La alegría que el trasmitía era evidente, a pesar de haber perdido la vista, siempre se mostraba dispuesto a socializar con las mascotas que tenía a su alrededor y con las personas que convivían con él.

Su nuevo amigo tiene un lugar especial y muy importante en el corazón de Stevie: Waffles, quien aceptó calurosamente a su nuevo compañero y ayudó a que creciera una hermosa amistad.

Stevie se convirtió en la fiel sombra de Waffles, siguiéndolo a todas partes, reflejando sus acciones y aprendiendo de él. Waffles animó y enseñó a su compañero todos los aspectos esenciales de la vida felina, desde moverse por los muebles hasta subir escaleras, con paciencia y cuidado. Esto, porque es un felino encantador y gentil que decidió ser protector y le enseño todo lo que necesitaba saber.

Esta historia es un ejemplo claro de que las segundas oportunidades pueden cambiar a un 100% la vida de una mascota. Desde un comienzo fue desafiante hasta que encontró un hogar amoroso y un mejor amigo en Waffles, el viaje de Stevie es un recordatorio conmovedor de que vale la pena esperar por las buenas cosas.